El top discos 2021 de Binary

Esta es nuestra lista de los 15 mejores álbumes de 2021 a pesar de todo.

12 enero 2022 ·
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A pesar de haber superado un año atípico, condicionado por la resaca del anterior y sin confiar plenamente en qué pueda depararnos el siguiente, una vez más los discos de música ha logrado abrirse paso entre la maraña de disgustos y desilusiones, y primar sobre todas las cosas. Así es cómo, a lo largo de este intenso periplo que ha supuesto 2021, hemos ido encontrándonos con ciertos valientes que en este incierto caos han hallado las herramientas necesarias para hacer que la rueda siguiese girando.

Ha sido un año de grandes discos debut y de prometedoras caras nuevas (Morreo, El Buen Hijo). Otras, en cambio, han renovado sus votos y se han consolidado más de lo que ya estaban (Triángulo de Amor Bizarro, Maria Rodés y David Rodríguez, VVV [Trippin'you], Axolotes Mexicanos, The Parrots). Ha sido el momento de comenzar a escuchar a esos talentosos productores que han dado un paso adelante y han dejado de estar a la sombra de terceros para demostrar su valía con nombre propio en discos (Alizzz, Fred Again.., Danny L Harle). Ha habido artistas que han decidido recuperar sus raíces (Califato ¾) o alzar la voz  en contra de los responsables que intentaron atentar a las suyas (Zahara). Pero sobre todo ha sido el año del empoderamiento y la honestidad emocional y de no quedarse calladas (Bad Gyal, Albany).

Os presentamos nuestra lista personal de los 15 mejores discos de 2021.

15. El Buen Hijo – ¡PAN PAN PAN! (Sonido Muchacho)

Las prisas nunca son buenas consejeras, y eso bien lo sabe este quinteto de la capital. Desde 2016 llevan buscándose y confeccionando un sonido que no ha dejado de evolucionar y girar sobre sí mismo, hasta llegar al presente año y alumbrar un trabajo en formato de larga duración. A juzgar por el peso de temas como ‘Aunque Pene’ o ‘Río de Janeiro’, percibimos que finalmente la formación madrileña comprendida por Alicia Ros, Daniel Rodríguez, David Chamizo, Marco Frías y Miquel Cañellas ha encontrado su camino, tras años de atajar el proyecto sin más pretensión que la de pasarlo bien.

Sin embargo, es tras haber fichado por Sonido Muchacho y como consecuencia de la buena aceptación de sus singles (algunos, incluso llegando a figurar en la popular serie de Netflix, 'Paquita Salas') cuando el grupo decide tomarse en serio su papel en la industria y termina confeccionando este álbum pop y de ambientación generacional, demostrando que ahora sí que sí, no hay vuelta atrás.

14. Morreo – Fiesta Nacional (Futuras Licenciadas)

Flequillos tazoneros, patillas largas, psicodelia pre-constitucional y esencia cañí. Estos son los elementos con los que Germán y Joseca han puesto en órbita su primer disco. De la mano de Futuras Licenciadas y bajo el nombre de “Fiesta Nacional”. Una intencionada celebración a todos esos ingredientes sonoros de arraigada tradición. A los que este dueto andaluz ha querido homenajear a través de una bella colección de once canciones de corte pop setentero en la que los guiños a icónicas bandas de la memoria nacional (como Los Brincos o Fórmula V) se dan la mano con referentes más contemporáneos y coetáneos. No sabemos si en una realidad paralela habríamos visto a Morreo protagonizando una actuación en ‘Popgrama’ o en ‘Aplauso’. Pero por lo pronto el éxito de este álbum debut ya les ha servido para demostrar su valía. Abriendo para nada menos que Lori Meyers en la sala La Riviera.

13. Maria Rodés y La Estrella de David – Contigo (Elefant Records)

Lo que esta inesperada y bella comunión de artistas nos ha demostrado es que no hace falta cambiar ni de continente ni de década para encontrarnos con un tándem musical de los que sientan cátedra. Maria Rodés y David Rodríguez llegan el uno al otro de casualidad, y en ese magma de carretera y furgo se termina forjando un vínculo artístico poderoso y brillante que, a través de un sonido country y folklorista, sus artífices nos trasladan a un relato sincero comprendido entre doce preciosas canciones en las que sus protagonistas apuestan por el amor real, el terrenal, el que corre serios riesgos de acabar mal.

12. Triángulo de Amor Bizarro - Detrás del Espejo: Variaciones y Ecos (Mushroom Pillow)

Por alguna (acertada) razón, la formación gallega Triángulo de Amor Bizarro creyó que sería buena idea reformular ese clásico instantáneo y álbum homónimo que lanzaron el pasado año, esta vez contando con la presencia de diversas voces amigas que otorgasen una perspectiva diferente a sus temas. Y qué razón llevaban. Si a uno de los álbumes que más nos gustaron en el ya extinto 2020 le sumamos el buen hacer y el toque personal de unos colaboradores de lujo como son Erik Urano, Soleá Morente, Carolina Durante, J de Los Planetas, Menta, Biznaga, Aries, o Sr. Chinarro entre otros tantos, el resultado habla por sí solo.

11. Axolotes Mexicanos - :3 (Elefant Records)

La de Olaya, Juan, Stephen, Mario y Lucas es una de esas súper-bandas que, a modo de cóctel, aúna y abraza influencias diversas y eclécticas que, sin una lógica expresa, terminan cuadrando de maravilla y dando pie a una cada vez más asentada trayectoria. A pesar de que sus miembros tengan puestos sus huevos en diferentes nidos (Carolina Durante, Confeti de Odio, Temerario Mario), la estabilidad de la banda original se mantiene intacta y además logran firmar un tercer disco de estudio en el que unas melodías de corte rápido y enérgico (al más puro estilo Elefant) y unas solapadas pero firmes referencias al pop y a la cultura audiovisual japonesa encuentran su nexo de unión con total acierto en sus álbumes.

10. Sen Senra – Corazón Cromado (Sonido Muchacho)

De un modo particularmente humilde pero prolífico y constante, el artista gallego Christian Senra ha logrado que en los últimos dos años todo lo que lleve su nombre se convierta automáticamente en sinónimo de hype y calidad. No le hacen falta más que siete canciones para darnos donde más nos duele (‘Me Valdrá La Pena’), emocionarnos (‘Tumbado En El Jardín Viendo Atardecer’), o arrancar nuestro puntito más sensual (‘Wu Wu’). Senra funciona a un ritmo diferente, ajeno al exigente ritmo de consumo efímero y con calma, pero aún así al de Vigo aún le quedaron fuerzas y tiempo este año para sacar una deliciosa colaboración con Julieta Venegas (‘De Ti’) que, ojalá, suponga su retorno al larga duración pronto.

9. Bad Gyal – Warm Up (UMG Recordings)

A estas alturas ya no se puede reivindicar más alto la contribución que Alba Farelo ha hecho a la música urbana en los últimos años. Sirvan estas ocho pistas para reivindicar su presencia, tendiendo puentes una vez más entre escenas y congregando poderosos nombres detrás de la producción (desde esa unión fuertemente ya asentada con Fakeguido y El Guincho, hasta colaboradores legendarios que se dejan caer en sus créditos, como el mítico Scott Storch). Dentro de un estilo ya icónico y no exento de atrevimiento, Bad Gyal se mueve cómoda en unos parámetros poco arriesgados pero funcionales que sitúan su carrera en un plano con más proyección internacional que nunca.

8. The Parrots – Dos (PIAS/Heavenly Recordings)

Los madrileños Álex de Lucas y Diego García constatan su regreso tras cinco años de ausencia con un anhelado segundo larga duración, en el que además pasan de ser un trío a una dupla, tras la salida de su antiguo batería, Larry Balboa. The Parrots han madurado, y donde antes veíamos un sonido garajero gamberro y distorsionado con trazas lo-fi, ahora distinguimos un rock de notable calidad y cuidado por los detalles. Un popurrí de géneros que oscila desde el punk, el funk o la psicodelia, que cuenta con la notoria mano de  Tom Furse (The Horrors) y Claudius Mittendorfer (Parquet Courts, Weezer, Temples) y simpares colaboraciones, como la de Los Nastys o C.Tangana.

7. Zahara – PUTA (GOZZ Records)

Un relato intenso y liberador contado desde la perspectiva de quien logra sobrevivirlo. Honesta, desgarradora, y viva. Nunca antes habíamos visto a una Zahara igual. Influenciada, en el mejor de los sentidos, por su compañero de mil batallas, Martí Perarnau IV. Quien además de arrancarle de dentro el valor necesario para contar su historia, también la arropa en esa particular persecución de un sonido renovado, fresco y luminoso. La energía que cada pieza de “PUTA” transmite. Logra que a su valiente voz se le unan muchas otras. Esas que necesitaban que alguien como ella pusiera palabra y rabia a la historia de tantas. 

6. Alizzz – Tiene que haber algo más (Warner Music/Whoa Music)

La lluvia de hits instantáneos con nombre propio que empezamos a recibir durante el pasado año ya nos alentaba de que tarde o temprano era obligatorio dar una salida formal al talento que Cristian Quirante lleva dentro. Más allá de las veces en las que Alizzz ha actuado de Rey Midas en la producción musical de otros artistas, convirtiendo en oro todo lo que tocaba, el público exigía verle firmar un trabajo como éste. Propio y personal, aunque no exento de grandes nombres a su alrededor.

Así es como confirmamos una vez más su impecable comunión con C.Tangana en ‘Ya No Vales’. La sorpresiva manera con la que maridan los imaginarios del productor catalán y de Rigoberta Bandini en esa oda al mañaneo que es ‘Amanecer’. O lo bien que se enfrenta él solo ante el peligro entre punteos post-punk y melancolía electrónica en ‘Ya No Siento Nada’.

5. Califato ¾ - La Contraçeña (Breaking Bass Records)

Si algo nos ha demostrado el presente año es que el arraigo y el origen siguen jugando un papel crucial en la creación artística y en el imaginario musical de los artistas de nuestro país. Cuando un colectivo tan brillante como el que forman las gentes de Califato ¾ empezaron a mostrarnos, con la maestría de un artesano futurista, lo bien que maridan esos sonidos de rancio abolengo con los movimientos sonoros de vanguardia, los miembros de una generación descreída y desapegada de lo suyo fuimos más conscientes que nunca del potencial que se ocultaba en nuestras propias raíces. “La Contraçeña” no solo ha creado escuela en la escena, sino que ha supuesto claramente una veda levantada para que muchos artistas patrios elaboren su particular éxodo, volviendo a donde todo comenzó. Pues ahí está todo lo que necesitamos.

4. VVV [Trippin'you] – Turboviolencia (Helsinkipro)

Aprovechando la celebrada estela que la gira de su anterior trabajo “Escama” había dejado tras de sí, la formación de Adrián Bremmer, Elianor Almenara y Salvador Urbaneja no ha querido hacerse de rogar y nos ha entregado un descabellado tercer disco que no dejará indiferente a nadie. “Turboviolencia” es la continuación natural de una propuesta con la que ya nos habían conquistado. Pero sirva este nuevo álbum para renovar sus votos y confirmar lo irresistible que es acabar totalmente entregado a esa espiral de electrónica oscura, distorsión, ecos de post-punk y zapatilla. Con una apertura de miras muy definitoria, VVV [Trippin'you] acreditan con valores de peso el estar suponiendo un renacer de una escena underground. Que parecía dormida y requería de ser renovada con urgencia.

3. Danny L Harle – Harlecore (Mad Decent)

Encontrar la emotividad y el sentimiento en melodías tralleras, sintéticas y maquineras. Que despiertan y remueven nostalgias de una manera tan singular, no es un propósito sencillo. Sin embargo, este productor británico ha conseguido llevar a un siguiente nivel la electrónica más básica y simplista. Proponiendo a su oyente objetivo una conexión directa con vibraciones de un pasado muy específico. En el universo de “Harlecore” conviven el romanticismo bakala. Los ritmos primarios. Las voces pitcheadas y los loops interminables de pura energía desmedida.

Además, para la producción de este debut en larga duración, Danny L Harle ha tenido a bien guardarse las espaldas contando con dos extraordinarios acompañantes, como es el caso de Hudson Mohawke y Caroline Polachek (junto a la cual también ha producido ese estupendo ‘Bunny Is A Rider’). Un auténtico bombazo de adrenalina que pondrá de cero a cien tu frecuencia cardíaca en cuestión de segundos.

2. Albany – Se trata de Mi (Ladradora)

No es la primera vez que vemos a Alba Casas, aka Albany, desnudando una melancolía generacional de lo más íntima en sus composiciones. De hecho, es esa distintiva naturalidad la que le ha permitido despuntar por encima de otros artistas de similar corte. Mientras siendo su segundo álbum el sitio en el que esa sinceridad amarga y catártica inunda como nunca su lírica y consigue atraparnos de manera única. Y es que, a pesar de contar con colaboradores y manos amigas de auténtico lujo (C.Tangana, Yung Beef, Lowlight, Sehemyre, Paul Married o EJ Marais), “Se Trata de Mí” hace un total honor a su título. Retrata con carácter y presencia la auténtica realidad de una artista que ya ha demostrado a partir de una fructífera actividad. Y un lenguaje honesto ser mucho más que una queen del sad trap.

1. Fred Again.. – Actual Life (April 14 - December 17 2020) (Atlantic Records)

Cuando el beat y el sample abrazan el sentimiento más crudo y real acaban saliendo joyas como este álbum. Fred Gibson ha sido el nombre del año dentro de la electrónica británica. Gracias a su inconfundible estilo y una franqueza que ha puesto ritmo a los fantasmas emocionales de muchos miembros de una misma generación. Llamando así la atención de diferentes y poderosas entelequias dentro de la industria musical. Como Ed Sheeran o el mismísimo Brian Eno. Más allá de las producciones que el londinense había dedicado a otros artistas, Fred Again.. ha decidido en el presente año emprender un viaje en solitario y con voz propia (o más bien, con muchas voces ajenas), dando pie a un diario personal en el que la pista de baile y la confesión más íntima son el denominador común.

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